domingo, 9 de octubre de 2016

Vuelvo al cole de nuevo

Buenas.
Hace un par de semanas me llamaron.
La verdad que los destinos que me ofrecieron no me gustaban demasiado, estaban lejos y eran para trabajar en la ESO o en Adultos. Así que con muchas dudas escogí la ESO. Porque al fin y al cabo es trabajo y es lo que una siempre ha querido, por lo que tampoco tengo derecho a quejarme mucho en ese aspecto.

Me he dado cuenta de que no puedes decir nunca" de este agua no beberé", siempre le he dicho a amigos que trabajan en institutos que los admiraba por trabajar con adolescentes, y aquí me veis todos los días lidiando con una clase de primero y segundo de la ESO, la verdad, no es para tanto, me lo esperaba peor.

Si tengo que resumir estas dos semanas semanas, la primera fue de agobio, me tuve que adaptar a una nueva etapa con contenidos superiores a los que yo daba, los compañeros y el equipo directivo te intentan poner al día con miles de cosas y todo no lo puedes asimilar a la vez, y para colmo me han escaquetado asignaturas que yo no debería dar, pero como esto es así te aguantas y te las comes con papas.
La segunda semana ya estaba más organizada, y creo que lo llevo bien, aunque hay momentos que pienso si lo estaré haciendo bien, si soy la maestra que ellos necesitan o debería implicarme más.

En fin, la baja es corta, sólo voy a estar tres semanas más y vuelve su maestra. Espero tener más suerte en el próximo destino y que me den más cerca de casa, aunque creo toda la suerte ya la agoté el año pasado, porque tener una vacante en un cole a 5 minutos de donde vives fue lo más.

 

lunes, 12 de septiembre de 2016

Cambiando el cole por la oficina del inem.

Si tuviera que definir mi día con una palabra esa sería: tristeza.

Hace un año estaba en delegación en un acto público eligiendo el que sería mi colegio por un mes y medio y que luego me permitiría escoger una vacante al lado de casa.
Hoy, un año después, estaba en la cola del paro de una triste oficina donde las risas y el alboroto se habían convertido en silencio y caras de circunstancia.
Y sí, soy una de esas miles de maestras que ha visto truncado su sueño por los recortes que según Susana Diaz no existen, porque aunque hay menos niños la plantilla es la misma. ¿Sabéis?
No obstante sé que voy a trabajar, aunque sea más tarde, lo haré. Pero no dejo de pensar en todos esos compañeros que tienen menos tiempo de servicio que yo y que saben que no van a pisar un aula.
Es triste, muy triste.


PD: Anécdota del día: Me encuentro a mi vecina en el ascensor con la niña que me dice: ¡Seño que otra vez empezamos el cole! Y la seño no ha podido más que limpiarse los dos lagrimones que le caían por las mejillas.
 

domingo, 5 de junio de 2016

Orgullosa de ellos.

El domingo partimos hacia Cazorla. Después de tantos meses esperando, llegó el día de irnos viaje de estudios.
Quizá para entender la historia tendría que contar que en estos meses he tenido que lidiar o enfrentarme a personas que porque han trabajado más años que tú, creen que pueden tomar decisiones por ti, o personas que piensan que debes seguirlas como un rebaño de ovejas y si no haces lo que ellas consideran lo correcto ya eres la peor persona del mundo.
El caso es que estas personas, las llamaré compañeras, decidieron que ciertos alumnos de mi clase no deberían ir al viaje, yo no estaba tan segura, porque su perspectiva o razones se basaban en el comportamiento de un día de viaje a Córdoba.

Estos niños habían cambiado un montón desde que entré a principio de curso hasta ahora, así que lo que hice fue hablarles claro. Ellos sabían lo que había y sabían que cualquier fallo les costaría el viaje, porque puestos a fastidiar, yo de eso sé bastante.

Y se portaron, mira si se portaron que no sólo aguantaron las tonterías de sus propios compañeros, sino que tuvieron que soportar insultos y otras cosas de niño de otro colegio que andaba por allí con unas maestras incompetentes totales.
La verdad es que esta historia da para otro post, pero yo no pude flipar más, no sé cuántas veces me pregunté cómo esas dos personas podían ser maestras, podían educar a niños cuando no tenían ni valores ni educación.

Y decir que nuestros alumnos chapó. No entraron en ningún momento en el juego de ellos, y aguantaron carros y carretas, así que no puedo decir otra cosa, estoy bastante orgullosa de ellos, porque se lo pasaron genial y demostraron tener clase, educación, respeto, ese que a los otros tanto les faltaba.

Y lo que más valoro es que iban tan concienciados de cómo se tenían que portar que se portaron mejor de lo que yo esperaba, así que más contenta no puedo estar. 

PD: Aún no se lo he dicho y creo que merecen saberlo, así que la clase de lengua del lunes va a ser de reflexión total.

 

miércoles, 10 de febrero de 2016

La que se monta en un momento con los grupos de Whatssap

A nadie le pilla por sorpresa que los grupos de Whatssap del cole son una caja de bombas.

La verdad es que yo, hasta ahora no había tenido ningún problema con mi clase o si ha habido algo, lo han solucionado entre ellos, así que por mi parte llevo unos meses bastante tranquila.
Para ponernos en antecedentes, cambié de cole. Ahora estoy en uno más cerca de casa y tengo una tutoría de sexto que da para muchos post.
Aparte doy sociales y naturales en otra clase y aquí es donde ha surgido el "problema". 
Tras la reunión de padres del 2º trimestre me comenta la tutora que los niños se han quejado a los padres de que no explico en naturales o sociales.
Yo ni corta ni perezosa le digo a la tutora, creo que o tus niños desconectan o me estás hablando de otra clase, porque no me cuadra.
No me cuadra porque conforme van leyendo el párrafo yo voy aclarando las cosas y se lo explico con otras palabras para que lo entiendan bien.De vez en cuando meto una broma para que se rían y hacer más llevadero las partes en las que se compone el aparato digestivo, que así a voz de pronto, puede parecer aburrido. Sólo me falta hacerle dibujos chachis en la pizarra, pero es que yo y el dibujo nos llevamos fatal, así que vamos observando los dibujos, se los enseño en la pizarra digital y vamos viendo las características a fondo.
Quedo con la tutora en hablar con los niños y que me lo aclaren.
Hablo con ellos, les doy la típica charla de que ya tienen la suficiente confianza conmigo para decirme las cosas y que no tengo que enterarme si hay un problema por los padres bla bla bla.
Después de soltar la retahila  los dejo opinar, que para eso han aguntado el tostón sin pestañear.Les pido que sean sinceros, que no pasa nada. y llego a la conclusión de que ellos no opinan eso, al contrario, que les gusta como doy las clases, que se rien con mis bromas y que no necesitan más explicaciones porque se enteran muy bien.
Ellos mismos empiezan a atar cabos, dicen que les ha pasado en otras asignaturas, que alguno que haya suspendido, habrá dicho eso en casa, porque siempre es más fácil echarle la culpa a la maestra, por supuesto.
Les he dejado claro que lo que piensen los padres me da igual, que a mí me gusta mi trabajo e intengo siempre hacerlo lo mejor que puedo. Que lo único que me preocupaba es que ellos no estuvieran agusto con la asignatura.
Así que por mí, que ponga en el grupo lo que quieran, yo voy a dormir igual que siempre.
 


 

domingo, 22 de noviembre de 2015

Llamadas que te hacen dar un gran salto de alegría.

A principio de curso me convocaron para un acto público donde asignarían las diferentes bajas que había para todo el curso.
Yo era la 70 y algo en elegir, así que cuando llegó a mí, lo único que quedaba o estaba en la otra punta de Málaga o era una baja que acababa en un mes.
En esos momentos de presión es difícil tomar una decisión adecuada, así que elegí la baja que estaba a 20 minutos de casa a espensas de que el próximo destino tuviera la misma suerte.

Muchos de los días, mientras iba conduciendo hacia mi cole, empezaba a darle vueltas y a pensar si no me había equivocado con la decisión tomada. 
Pero como siempre he creido, el destino te lleva donde te tiene que llevar.
 Al día siguiente recibí otra llamada de delegación.Recuerdo que me dijo que tenía una vacante y muchas sustituciones.
Yo le pregunté dónde era la vacante y qué cole era.
 Me dijo en Málaga capital y el cole es tal.
Cuando me dijo el nombre del cole me faltó llorar.Era el cole que estaba al lado de mi casa.Evidentemente me quedé con ese, acordándome en todo momento de que estaba claro de que tenía que escoger el cole anterior para al final quedarme en éste.
Pues eso, cuando colgué me pasé 5 minutos saltando como un canguro por toda la casa, porque estas cosas y esta suerte no la tiene una todos los días.

lunes, 12 de octubre de 2015

Sinceros son un rato.

Después de un mes con ellos, me he dado cuenta de que mis alumnos oyen lo que les conviene.

Hay algunos que no se enteran de lo que hay que hacer cuando explicas la actividad, pero activan totalmente el radar cuando estás comentando algo con alguna compañera.

El otro día le estaba diciendo a una compi "Eso es algo importante que tengo que dejar listo antes de irme".

Mis pequeños, que supuestamente estaban resolviendo problemas, levantaron al unísono la cabeza y uno de ellos dijo.

Maestra ¿Te vas? ¿Y por qué te vas?
Yo que no tenía ganas de darle explicaciones de la cruda realidad les dije.
- Sí, me voy el miércoles, porque nunca me escucháis y tampoco me queréis.
Mi M, que es muy espabilada saltó: Maestra, puede que algunos no te escuchemos, pero quererte, te queremos todos.
Y no tuve más remedio que ponerle a todos un punto verde, pero no de los normales, sino de los fosforitos, que molan más.

domingo, 4 de octubre de 2015

Y como todos los niños volvimos al cole

Pues eso, este año como ya tenía algo de tiempo trabajado volví al cole el 10 de septiembre, como los niños.

Esta vez me tocó una clase de tercero de primaria.

-Una clase que abren los ojos de par en par, cuando le dices que ya son muy mayores y por eso, van a trabajar mucho.

- Unos niños que el primer día escribían torcido en sus libretas , no dejaban márgenes y los espacios eran inexistentes.

- Unos niños que, tras explicarle durante media hora, cómo se hacía la actividad, y asentir todos que no tenían ninguna duda, venían a tu mesa con cara de circunstancia para que se lo explicaras de nuevo.

- Unos niños para los que, asignarle un punto verde es lo más.

-Unos niños que mueven la mano a la velocidad del rayo, cuando la recompensa es un dibujo de los minions.

-Unos niños charlatanes que cierran el pico en cuanto les enseñas el texto que van a copiar como sigan así.

- Unos niños que te piden permiso hasta para agacharse a coger el lápiz.

- Unos niños que se emocionan porque van a salir a 200 metros del colegio a echar una carta en el buzón.

- Unos niños, que a las 10 de la mañana te están preguntando cuánto queda para el recreo porque tienen mucha hambre.

- Unos niños que te pregunta si tal palabra lleva tilde.

-Unos niños que ponen cara de espanto si les mandas más de cuatro ejercicios para la casa.

En fin, unos niños bastante tiernos.