viernes, 12 de junio de 2015

Vuestra Graduación

 Han pasado tres meses desde que vuestra maestra se incorporó. A mí me dieron otro cole más cerca de casa. 
He entrado varias veces en la clase de sexto para sustituir y cada día que pasaba me daba cuenta de que estos alumnos eran totalmente diferentes a vosotros, no estudiaban, no tenían interés por participar, se pasaban el día peleando e intentando hacerse daño.
Eso me hizo valoraros más, reafirmar el hecho de que había tenido mucha suerte al encontrar a los alumnos casi perfectos.
Pasaron los días y por el grupo de Whatssap me preguntabais si iba a ir a vuestra graduación.
Yo me moría por ir, pero quedaba mucho tiempo para decidirlo. Así que os dije que si iba era por sorpresa.

Mucha gente me preguntaba si iba a hacer tantos kilómetros en un día para unas horas.
Vosotros me contabais vuestras aventuras diarias, los padres me contaban lo mal que lo estaban pasando porque vuestra maestra no había querido ir al viaje de estudios con vosotros.
Entonces decidí que haría lo posible para no decepcionaros.
La verdad que no fue fácil, pero al final lo conseguí.
Recuerdo como M cruzó la calle sin mirar cuando me vio, el abrazo que me dio y su cara de ilusión fue espectacular.
L corrió un trazo largo porque me había visto antes, y así con casi todos ellos.
Así que a todas esas personas les digo que hay kilómetros que no duelen, porque la cara de ilusión con la que me recibieron ha hecho que tenga energía extra una semana.

Qué guapos estaban y que orgullosa me sentía de ellos. 


Son niños buenos, con valores, con futuro. 
Yo creo que los alumnos que todo el mundo sueña tener.
Van a ser grandes personas, lo sé.